PaRA SER FELICES
Tengo el gusto de
ofrecer al lector este libro que presenta, en apretada síntesis, lo que es la
vida cristiana, en orden a vivir felices
en la tierra –una felicidad condicionadísima a menudo por múltiples
factores, y jamás perfectamente realizada-.
Felicidad imperfecta
la del cristiano en la tierra, pues aquí abajo no podemos alcanzar en plenitud
al Señor, que es la razón de nuestras aspiraciones y el Sumo Bien del hombre.
No obstante, viviendo
en gracia –según la clásica definición de la misma: “la gracia es el Cielo
incoado, anticipado”-, en la medida que vivimos en comunión con Dios podemos
concluir que, de algún modo, ¡ya estamos en el Cielo!... Lo cual comprende que
también vivamos en comunión con los hombres, nuestros hermanos.
Lo que se nos pide
ahora es que perseveremos en la fe y en la vida de la gracia, que seamos
cristianos que se esfuerzan por alcanzar la perfección de la caridad, como
fieles hijos de Dios y de la Iglesia…
Falta poco ya, pues
la vida –en su alocado correr de los días y los años-, pasa pronto, ¡muy
pronto!... Así lo han percibido los hombres de todos los tiempos, hasta
sentenciar: tempus fugit!..., ¡la
vida se nos va como el agua entre las manos!...
Por eso, podemos
aseverar: pronto, ¡muy pronto estaremos
con el Señor!... Perseverando en la vida de la fe y de la gracia, ¡pronto
veremos al Señor cara a cara!, ¡y Él nos transformará penetrándonos de su Vida
divina, para hacernos eterna e inmensamente felices!...
¡Esperemos, pues con
paciencia!, como instaba san Pablo a los primeros cristianos… (cf. Rm 8,215).
¡Pronto el Señor nos llamará a su presencia!... ¡Él mismo vendrá a nuestro
encuentro!...
Mientras esperamos
ese feliz momento, a fin de paladear y gustar, anticipadamente, la felicidad
que nos espera en el Cielo, este sencillo libro es una especie de compendio para ser felices en la tierra.
Quien quiera serlo de verdad, y se atreva con lo que sugieren las páginas que
siguen, ¡ya me dirá!...
De todos modos, que
nadie se extrañe o alarme por las páginas que siguen a continuación, pues ¿qué
nos vienen a decir?... ¡Nada nuevo, nada original!... Tan sólo desglosar, y
extraer las consecuencias o derivaciones de aquella célebre sentencia del
Hombre-Dios que, en su paso por este mundo, tuvo la originalidad de afirmar lo
que jamás hombre alguno ha dicho –ni podrá decir-: Yo soy el camino, la verdad y la vida (Jn 14,6).
Pedro Jesús Lasanta
I-
TENGAMOS PRESENTE LA RAZÓN DE NUESTRA VIDA
Dios,
fundamento de nuestro ser
Vocacionados
al amor
El hombre
quebrantó el proyecto creacional de Dios
Pero Dios no
cejó en su amor por nosotros
II-
¿PARA QUÉ VIVIMOS?
Razón de la
pregunta
Demos gloria
a Dios
La dicha de
ser cristianos
La alegría
de los hijos de Dios
Evitemos el
pecado
Hagamos
penitencia
Tengamos
afán de santidad
La santa
indiferencia
III-
CÓMO PODEMOS SER FELICES
a)
Llamados al amor
Conscientes
del amor que Dios nos tiene...
Amemos a
Dios
Gastemos la
vida amando
Y amemos al
prójimo...
- Viviendo en familia somos felices
Siendo
misericordiosos
Perdonando
siempre y en todo
Seremos
felices si somos generosos
b)
Cumpliendo la voluntad de Dios
Para ser
felices, cumplir la voluntad de Dios
Con la ayuda
de la gracia
En la
vocación a la que Dios nos llama
Anclados en
la verdad
Conociéndonos
tal como somos
- Examen de conciencia
c)
Unidos a Dios
Podemos ser
felices convirtiéndonos
Viviendo en
la presencia de Dios
Llamados a
ser contemplativos
Correspondiendo
a la gracia
Teniendo en
Dios una confianza a prueba de todo
Obedeciendo
como hijos de Dios
Usando bien
de la libertad
Moldeando
bien el propio corazón
d)
Santificando nuestras vidas
Con la luz
de la fe
La fuerza de
la esperanza
Nutriéndonos
de la Palabra de Dios
La gracia
del Bautismo
El
sacramento de la Penitencia
- Dolor de haber ofendido a Dios
Participando
en la santa Misa
La
Confirmación, sacramento de la madurez cristiana
Somos
alimentados con el pan de los ángeles
Seamos
apóstoles de Cristo
IV-
ACTITUDES CRISTIANAS
Felices en
la Iglesia de Dios
Amor a la
cruz
Simplificando
la vida por medio de la rectitud de intención
Seamos
afables y cordiales con todos
Hombres con
amigos
Comprensivos
con todos
V-
VIVAMOS TODAS LAS VIRTUDES
Entregados a
Dios
Siendo
humildes
Siendo
pacientes
Con la
fortaleza de Dios...
Viviendo en
castidad
Viviendo una
vida austera y sobria
Con la
mansedumbre de Jesús
Viviendo en
paz
Siendo
justos
El
desprendimiento
Perseverando
y siendo fieles
VI-
MEDIOS PARA SER FELICES
Ser hombres
de conciencia recta
Dar gracias
a Dios
Vivamos en
la alegría del Señor
Seremos
felices si hacemos oración y penitencia
Si recibimos
los sacramentos
EPÍLOGO:
La felicidad del Cielo
Felices como
María, con la Madre...